Marketing Contextual
Las emociones pueden influir en nuestras decisiones de compra y en nuestra percepción de un producto
By
Smoot
28/08/2023
La segmentación de mercado ha sido durante mucho tiempo una estrategia clave para las campañas de marketing de las marcas. Dividir a los consumidores en grupos demográficos, geográficos o psicográficos permitía dirigir los mensajes hacia públicos objetivos concretos. Sin embargo, en la búsqueda constante de conexiones más profundas y significativas con los consumidores, las empresas están empezando a darse cuenta de que hay algo que va más allá de la segmentación: las emociones.
El poder de las emociones en el marketing es innegable. Las emociones pueden influir en nuestras decisiones de compra, en nuestra lealtad a una marca y en nuestra percepción de un producto o servicio. A medida que las empresas buscan humanizar sus estrategias de marketing y establecer conexiones genuinas con los consumidores, las emociones se han convertido en un factor clave.
Emoción y decisión de compra
Cuando observamos de cerca nuestro propio comportamiento como consumidores, es evidente que las emociones desempeñan un papel crucial en nuestras decisiones de compra. Nuestras decisiones de compra están invariablemente influenciadas por cómo nos sentimos en ese momento.
No solo se trata de lo que las marcas venden, sino también de cómo hacen que sus clientes se sientan. ¿Cómo se siente un cliente al interactuar con una marca? ¿Se sienten valorados y entendidos, o se sienten como simples números en una base de datos? Las respuestas a estas preguntas pueden marcar la diferencia en la lealtad del cliente.
Creando conexiones emocionales a través de la publicidad programática
La publicidad programática ha revolucionado la forma en que las empresas se conectan con su audiencia en muchos sentidos. Al aprovechar la tecnología, este tipo de publicidad permite una segmentación precisa que puede estar más en sintonía con las emociones de los consumidores de lo que podríamos imaginar.
En el caso de Smoot.ai, no estamos hablando de una segmentación basada en datos de audiencia, sino de emociones en el sentido estricto de la palabra. Y es que, esta herramienta de compra de medios digitales identifica los entornos más adecuados para las marcas en base a las emociones que estas quieran transmitir. Y, del mismo modo, identifica aquellos entornos en los que, por el tipo de contenido, podrían llegar a generar un sentimiento de rechazo de los consumidores hacia las marcas.
Lealtad y satisfacción del cliente
La construcción de conexiones emocionales con los consumidores permite atraer nuevos clientes y retener a los existentes. Aquellos que se sienten emocionalmente conectados con una marca tienden a ser más leales y están dispuestos a gastar más en productos o servicios de esa marca. También son más propensos a recomendar la marca a otros.
Cuando los clientes están satisfechos emocionalmente, se convierten en defensores de la marca, compartiendo sus experiencias positivas con amigos y familiares y defendiendo la marca en tiempos de crítica. Esto puede tener un impacto significativo en la reputación y el éxito a largo plazo de una empresa.
Las empresas que buscan ir más allá de la segmentación deben centrarse en las emociones que pueden transmitir a sus consumidores, en contar historias que resuenen emocionalmente y en construir conexiones basadas en la empatía y la confianza.
Un marketing efectivo es aquel que genera confianza y que, a través de esta se genera un vínculo.